El veganismo, más allá de una forma ética de vivir respetando la vida de todos los animales, es la única forma de vida posible a largo plazo. Para todos. Sin veganismo no se le podrá dar a nuestros hijos e hijas una vida mínimamente parecida a la que hemos tenido. No ser vegan es condenar a tu descendencia a pasar hambrunas, escasez, catástrofes naturales y a convertirlos, en muchos casos, en refugiados climáticos.
Y esto no es una teoría. Es una realidad corroborada. Y es precisamente por esto, porque sin veganismo no hay futuro, por lo que los negocios veganos son el futuro. No van a pasar de moda. No van a quebrar. No van a desaparecer. Los negocios veganos son la respuesta lógica a un mercado que demanda una alternativa sostenible y ética. El mercado vegano (o plant based, realmente) seguirá subiendo y subiendo cada vez más hasta convertirse en unas décadas en el mercado principal.
CRECIMIENTO EXPONENCIAL
Solo hay que ver la proyección que ha ido teniendo el mercado plant based desde hace varios años. Está creciendo alrededor de un 50% cada año, y se estima que para el 2030 el mercado de los alimentos hechos de plantas crecerá un 450%, suponiendo casi un 8% del total del mercado de alimentos (Fuente). Sinceramente, nosotras creemos que será mucho más. Esta alternativa ganará cada vez más adeptos, impulsada no solo por el aumento de la oferta de muchas empresas interesadas en “tener su trozo de pastel”, sino también por los propios gobiernos y organizaciones como la OMS.
Está claro y más que demostrado que una dieta sin productos de origen animal es más beneficiosa para la salud y más sostenible para el medio ambiente. Sin embargo, como lo que lleva a promover cualquier cosa por parte de las instituciones es la rentabilidad que se obtenga a cambio, para ellas no ha sido una realidad a tener en cuenta hasta hace poco. Y cuanto más dinero dé, más lo van a promover. Por eso creemos que el aumento de este mercado será mucho mayor de lo que se estima, porque no han tenido en cuenta que los grandes altavoces se volverán cada vez más partidarios conforme más rentable sea este negocio.
¿PUEDE AYUDAR EL VEGANISMO A TRANSFORMAR EL CAPITALISMO?
Esta es una cuestión muy difícil de responder. Realmente, parte del movimiento vegan va en contra del modelo económico capitalista. Se podría decir que tiran de extremos contrarios o que están constantemente en un pulso. Sin embargo el veganismo no ha tenido más remedio que adaptarse a este modelo de consumo e intentar cambiarlo desde dentro. No sabemos si podrá transformarlo en su totalidad a un sistema más justo, pero lo más probable es que, siendo el veganismo un movimiento sustentado en valores tan profundos y éticos como en los que lo está, pueda influir positivamente.
CÓMO APOYAR CONSUMIENDO
El mercado dentro de poco se llenará todavía más de productos plant based, eso está claro. Es entonces nuestra responsabilidad consumir no basándonos en productos, sino en marcas. Y comprar solo productos de marcas 100% vegetales, éticas, sostenibles y antiespecistas. De nada nos sirve alimentar económicamente a marcas que destinan nuestro dinero a la explotación animal o humana. Todas las personas veganas sabemos que el veganismo es más que una dieta, es una filosofía de vida y un posicionamiento político. Y consumir acorde con nuestros ideales requiere un esfuerzo inicial de investigación. Debemos saber lo máximo posible sobre esas marcas y sus valores y ver si son merecedoras de nuestras compras. Así, quizá no podamos cambiar el modelo económico, pero sí podemos hacer que ganen peso en el mercado aquellas empresas responsables que pueden hacer el capitalismo más verde y menos salvaje.