por Mar | Jul 31, 2023 | Veganismo
Todos los cambios en la vida de una persona suponen, a su vez, un cambio en sus relaciones. Ya sea voluntaria o involuntariamente, cada aspecto que evoluciona hacia una dirección diferente en el camino de alguien influye en el camino de quienes están en su entorno, acercándose o alejándose. Irse a otra ciudad o país, el crecimiento de la familia o un cambio de horarios de ocio son las típicas cosas que le pasan a cualquiera y que condiciona sus relaciones. Teniendo que hacer, más de una vez, algún esfuerzo o sacrificio para mantener amistades. Pero, cuando hablamos de un cambio tan profundo en las bases de la ética como una transición al veganismo, la cosa se complica. Conservar estas amistades requiere de otro tipo de esfuerzos y por eso os queremos dar una serie de consejos para mantener una buena relación con vuestras amistades no veganas.
CONSERVAR AMISTADES NO VEGANAS COMO EMPRENDEDORAS VEGANAS: EL MÁS DIFÍCIL TODAVÍA
Esto se magnifica en el caso de trabajar en un emprendimiento vegano. Como es nuestro caso en la agencia de marketing ético La Zorra. Ya que casi todo nuestro entorno laboral gira alrededor del movimiento vegano y pasar de la esfera laboral a la esfera social implica un contraste todavía mayor. Si trabajas en un emprendimiento vegano, sabrás exactamente a lo que nos referimos, ¿verdad?
Por eso queremos dar algunos consejos para poder mantener una buena relación entre amistades veganas y no veganas.
Cárgate de paciencia.
Una de las mejores formas de conseguir esto es recordar que, por mucho que desapruebes el comportamiento y el consumo de tus amigues no vegan, tú también estuviste en esa posición. Intentar recordar el punto de vista que tú tenías y lo que te llevaba a pensar así te ayudará a empatizar y conservar amistades no veganas.
No discutas, dialoga.
Tu veganismo es un tema muy goloso, y siempre habrá alguien que quiera hablar de él. Incluso muchas veces nuestra simple presencia puede ser percibida como un ataque solo por existir. Pero tenemos que elegir nuestras batallas, hay amistades con las que se puede debatir y otras con las que no. No es nada malo limitar este tema de conversación a aquellas amistades con las que se puede mantener un diálogo desde el respeto.
Comunica sin atacar.
Lo sabemos, es súper difícil entender cómo es posible que, una persona a la que quieres, con acceso a la misma información que tú, no haya cambiado su punto de vista tal y como tú hiciste. Y, llegado un punto en tu camino dentro del veganismo, es casi imposible no hacer activismo. Pero evitar que las otras personas se sientan atacadas con tus palabras es una actitud (no solo respecto al veganismo) que es importante tener. Puedes exponer tu punto de vista desde una posición informativa, haciendo hincapié en lo positivo que obtienes del veganismo. Atacar directamente no solo causará dolor emocional a los otros, sino que además los alejará de la perspectiva que quieres que comprendan.
Prepárate las respuestas a las preguntas que sabes que te van a hacer.
Van a hacerte millones de preguntas. Y probablemente más de una vez. Y no lo hacen para fastidiar (la mayoría de veces) sino para intentar acercarse más a ti. Mantener una posición informativa y didáctica sobre este tema les ayudará mucho a comprenderte y empatizar contigo.
Además, recuerda que tú formas parte del movimiento, recibes información constante voluntaria e involuntariamente, pero elles no. Probablemente tú seas de las pocas fuentes de información sobre veganismo que tengan. Así que es normal, aunque hayan leído y visto cosas en internet, darán más validez a lo que tú digas. Y cuantas más cosas sepan por otros canales, más cosas querrán preguntarte (¡y eso es muy bueno!).
Rompe mitos con pruebas y hechos.
Al vivir alejados del veganismo, estarán llenos de información falsa o sesgada sobre este. Así que puedes informarles correctamente tú misme o recomendarles documentales, estudios, páginas o cuentas en redes sociales para que comprueben que las falsas creencias sobre el veganismo son exactamente eso: falsas.
Ejemplifica con elementos tangibles: invítales a comer.
Por mucho que hables con elles del tema, al final se trata de un tema ético. Y la ideología es muy difícil de transmitir. Así que invítales a comer. Probar platos veganos hará que dejen de pensar que estás comiendo mal o que tu posicionamiento te limita a la hora de disfrutar con la comida. Y aquellas amistades que dicen cosas como “qué pena que no puedas comer esto”, verán que de pena nada. Y es más que probable que muchos de los platos que prueben por primera vez les gusten tanto que les abramos una puerta a incluirlos en su propia dieta.
Abrazar el veganismo es ver el mundo de una forma totalmente diferente. Una forma que choca directamente con la de otres. Por eso, mantener un vínculo con una persona que ya no comparte la misma ideología y conservar la amistad es, en ocasiones, un trabajo costoso que necesita paciencia y respeto por ambas partes.
por Mar | Jul 4, 2023 | Actualidad, Veganismo
La mayoría de nosotres hemos estado al otro lado. Hemos sido consumidores de productos de origen animal y hemos visto el veganismo desde fuera. Así que comprender la otra postura nos es más fácil, ya que alguna vez estuvimos ahí. Pero entender el veganismo sin ser vegan es una tarea muy complicada por varias razones:
Es difícil entender otros valores éticos (como los del veganismo)
En general entender la ética de otra persona, sobre todo cuando esta es contraria a la nuestra de alguna manera, es difícil. Y cuando tienes toda una sociedad que te apoya en tu forma de pensar y vivir, lo es todavía más.
Sin embargo, cuando se trata de denunciar costumbres, tradiciones o valores éticos de otras culturas que, por ejemplo, atentan contra los derechos humanos, es sencillo señalar y decir “sus valores no son correctos”. Y esto es tan sencillo porque es algo externo a la cultura propia y porque en estos casos las víctimas son seres humanos.
Percepción de los animales como seres no sensitivos
La falta de empatía hacia los seres sintientes que no son parecidos al ser humano se da porque son percibidos como cosas, no como individuos. Y aunque haya especies animales que en la sociedad occidental no son percibidas como comida (como perros o gatos), estos tampoco tienen el “privilegio” de ser considerados algo más que complementos u objetos.
Y, aunque sea fácil llegar a entender que no hay tanta diferencia entre un perro y un cerdo, para la normalización del consumo de uno frente a la protección del otro es necesario que exista una desensibilización basada en una ignorancia voluntaria de la realidad.
Hoy en día esta falsa percepción de los animales está sustentada por la publicidad y la desinformación, bien diseñadas para evitar la culpabilidad en el consumidor.
Desinformación voluntaria sobre la realidad animal y nutricional
En la era de las comunicaciones que vivimos en occidente, donde quien quiera puede acceder a una sobrecogedora cantidad de información sobre prácticamente cualquier tema, quien no sabe es porque no quiere saber.
Pero indagar en temas que te generan incomodidad con la opinión que ya tienes formada es emocionalmente complicado. No es del agrado de nadie darse cuenta de que no están comulgando con su propia ética y que el consumo de animales no solo no es necesario, sino que es fomentar el maltrato y la muerte de seres sintientes inocentes.
Por esta razón se busca una justificación de ese consumo, aferrándose a argumentos que en la mayoría de casos ni siquiera son ciertos. Como que el consumo de carne es necesario para estar sano: “Sí, yo como animales aunque estos sufran, pero porque debo hacerlo para sobrevivir”.
Entender el veganismo desde fuera es muy difícil porque para entender algo de verdad debes acercarte. Y acercarse al veganismo es precisamente lo que no quieren hacer. Porque cuanto más se acercan más razones encuentran para reprobar sus propios hábitos de consumo. Intentar entender el veganismo es tan difícil porque es el primer paso hacia formar parte del movimiento.
por Mar | Abr 26, 2023 | Actualidad, Veganismo
Seguro que os suena el libro La política sexual de la carne: una teoría crítica feminista vegetariana, publicado en 1990 por la escritora y activista Carol J. Adams. En él se aborda el tema del feminismo interseccional y las conexiones entre el sexismo y el especismo. Y se analizan las relaciones que hay entre el consumo de carne y la masculinidad.
Como damos por hecho que todes sabemos lo que es el machismo y el especismo, sería recomendable empezar a hablar de este tema analizando el concepto de interseccionalidad. Este término fue acuñado por la abogada y académica especializada en cuestiones de raza y género Kimberlé Williams Crenshaw en 1989. Viene a significar que “todas las opresiones están relacionadas entre sí y que existe un sistema opresor en el que participan múltiples formas de discriminación”.
¿Y qué tiene que ver esto con el veganismo? Pues todo. Porque ¿qué es el especismo si no la opresión del ser humano sobre el resto de especies animales? Tanto sexismo como especismo están cortados por el mismo patrón y reflejan las mismas acciones bajo el mismo pretexto: mujeres y animales son oprimides y abusades bajo la creencia de ser inferiores. Y como grupos sociales inferiores, los grupos sociales superiores tienen derecho a dominarlos.
De este modo no ser vegane significa aceptar que hay seres que nacen con más derechos que otros. ¿No es esta precisamente la falacia contra la que se lucha en el feminismo día tras día? Por eso el feminismo debe ser interseccional.
Luchas interseccionales
Una de las principales razones por las que se subordina a ciertos grupos sociales es porque, o bien se piensa, o bien se quiere hacer pensar, que los grupos subordinados están compuestos por individuos sin intereses propios. Y que existen para unas funciones concretas que, casualmente, son beneficiosas para los que intentan hacer calar ese pensamiento. Alice Walker, escritora afroamericana y feminista, lo resume muy bien: “Los animales del mundo existen por sus propias razones. No fueron hechos para los humanos, del mismo modo que los negros no fueron hechos para los blancos ni las mujeres para los hombres.”
Los animales no son ALGO. Los animales son ALGUIEN. Igual que las mujeres no somos ALGO, somos ALGUIEN. Los animales son individuos con intereses propios y el ser humano no tiene ningún derecho sobre ellos. No son un recurso para el ser humano, igual que las mujeres no son un recurso para el hombre.
Feminismo interseccional: máquinas de parir
Una de las principales diferencias entre una mujer cisgénero y un hombre cisgénero es la capacidad gestante. Y esta es una de las excusas que los hombre CIS han usado (y usan) para reducir a la mujeres CIS: la función de una mujer CIS es tener bebés y criar bebés. Los animales hembra siempre han sido explotados por esto. Está claro que en la industria ganadera todos los animales sufren, pero las hembras son, con diferencia, las más explotadas. Por tener esos órganos reproductivos las hembras son tratadas como máquinas. Y no olvidemos que una vaca no da leche por ser vaca, da leche por ser MADRE. Las vacas son sometidas a inseminación forzada una y otra vez solo para tener bebés para que sean la comida de un ser humano. Y después alargar lo máximo posible el periodo de lactancia para robar la leche destinada a su bebé para que sea la bebida de un ser humano. Y cuando sus cuerpos no dan más de sí son enviadas al matadero. Si esto se lo hicieran a una hembra humana ¿qué pasaría? ¿cómo se llamaría?
No explotar animales no humanos es otorgarles la dignidad que se merecen y que hoy por hoy no tienen. Es importante hablar de feminismo interseccional porque ¿qué diferencia hay entre una lucha de mujeres por tener una dignidad que se cree solo perteneciente a los hombres y una lucha de humanes por otorgar a los animales una dignidad que se considera propia de los seres humanos? La diferencia es que las mujeres tenemos voz y los animales no la tienen. Nosotres, como agentes morales, tenemos la responsabilidad de ser esa voz.
por Mar | Ago 24, 2022 | Actualidad, Veganismo
La respuesta a la pregunta que lanzamos no es fácil y variará en gran medida de una persona vegana a otra. Sin embargo, no es complicado imaginar que aquellos que respondan SÍ, tarde o temprano verán su relación afectada por una cuestión ideológica tan importante. Siendo así ¿cómo ligan los veganos?
El veganismo no es solo una dieta, la dieta vegetal forma parte de una forma de vida y consumo y de unos valores y ética mucho más profundos. Así pues, lo cierto es que, desde el punto de vista de la mayoría de los veganos, empezar una relación con una persona no vegana tiene fecha de caducidad.
Se podría comparar con una relación entre dos personas militantes de partidos políticos con ideales opuestos. Al principio, probablemente se decida no tocar ese tema por el bien de la relación. En el veganismo será un poco más difícil porque no es un tema que se pueda evitar tan fácilmente (comemos de 3 a 5 veces al día, es difícil no pensar en ello cuando está tan presente), sin embargo si no hay convivencia tal vez se pueda conseguir evitarlo.
El problema vendrá conforme la relación se vaya consolidando. A la hora de vivir juntos, ¿el vegano aceptará tener piezas de animales o productos procedentes de la explotación y el maltrato animal en su nevera? Y si llegan los hijos, ¿el vegano aceptará educarlos en una ideología no vegana en la que matar y explotar animales sea algo correcto?
La respuesta a estas preguntas, como ya hemos dicho, dependerá de cada persona. Para hacernos una día más realista, hemos realizado una pequeña encuesta en la que hemos confirmado algo que era fácil de imaginar: la mayoría de veganos no estarían dispuestos a tener una relación sentimental estable con una persona no vegana. Sin embargo, un porcentaje moderado sí aceptaría tenerla con una persona vegetariana pero, preferentemente, si está en transición al veganismo.
¿LIGAR CON VEGANOS? ¡HAY UNA APLICACIÓN PARA ESO!
Un error muy común en el que caemos algunas personas veganas es pensar que podemos empezar una relación con alguien omnívoro y convertirle poco a poco al veganismo. En general empezar una relación no aceptando a la otra persona tal y como es ya es un error, pero si encima se trata de algo tan importante como el veganismo, que engloba unos ideales y un estilo de vida tan concretos, en muchos casos será una batalla perdida.
Y es por esto que han nacido las aplicaciones para ligar y encontrar pareja para veggies:
Veggly es una de las más famosas. Funciona básicamente como un Tinder: te muestra las personas que están más cerca de ti, permite filtrar por edad y distancia, y cuando haces match tienes un chat donde conocer mejor a esa persona.
No es una aplicación como tal. Es una web gratuita con relativamente bastante gente en España. Funciona como cualquier página de contactos: puedes mandar fotos, filtrar, chatear, etc. Dispone de una modalidad premium que te permite otras opciones de contacto y mensajería.
También es una web donde te registras para conectar con veganos y puedes filtrar por crudiveganos, ovolactovegetarianos, frugívoros, macrobióticos, etc.. El único problema por ahora es que solo está en inglés. Aunque es posible encontrar a gente de España.
Seguramente, con el tiempo, al aumentar el porcentaje de veganos, sea más fácil (estadísticamente hablando) encontrar el amor cerca de ti. Pero, por ahora, podemos hacer uso de estas webs y aplicaciones que nos ayudan a filtrar los candidatos y candidatas para ir un poco más a lo seguro y poder conectar con personas con los mismos ideales.
Sin duda el tema del que hemos hablado hoy es uno de los más controvertidos dentro del veganismo y del que más se puede debatir y opinar. Por eso, ahora queremos oíros a vosotros:
Y tú, ¿estarías dispuesto a tener una relación sentimental con una persona no vegana?